Esta preciosa gema del lapislázuli es más que conocida por todos por su eléctrico color azul ultramar que la distingue de cualquier otra piedra. Esto se debe a que es una roca metamórfica con una presencia mayoritaria de lazurita, la encargada de darle ese color. Además, tiene un característico brillo, fruto de la presencia de la pirita en su composición. Y estas dos piedras se complementan a la perfección con el silicato, el tercer componente de esta piedra que se considera semipreciosa.
Desde la Antigüedad, el lapislázuli ha sido una piedra muy apreciada en la joyería, habiéndose encontrado ejemplares de joyas con esta piedra a lo largo de los siglos, todas ellas de gran belleza. Su nombre contiene una mezcla entre el latín, el sánscrito, el persa y el árabe clásico. Te contamos a continuación cuáles son sus propiedades más destacadas.
Siempre ha estado asociada a numerosas supersticiones y creencias. Ya en el antiguo Egipto se creía en sus propiedades medicinales, para las que se usaba en polvo. También tenía un uso importante en joyería y solía ir acompañada de un escarabajo incrustado, ya que ambos se consideraban sagrados, tanto el insecto como la piedra. Los egipcios tenían también predilección por incluir esta piedra en las máscaras funerarias.
Ya en la Edad Media, su importancia vino de la mano de una de sus características más útiles: su uso como pigmento. El polvo de este mineral recibe el nombre de lazurita y era muy codiciado por los pintores por el intenso azul que aportaba a cualquier cuadro. Los pintores del Renacimiento europeo fueron los más interesados en su pigmento por la gran durabilidad y estabilidad que tenía.
Figuras como Leonardo da Vinci o Alberto Durero llegaron a llamar al pigmento el oro azul.
Y es que no era para menos, ya que el precio del polvo de lapislázuli era cuatro veces el del oro por aquel entonces. En la época también se usaba a la hora de teñir tejidos y telas de todo tipo y para decorar muebles.
Cómo usar el Lapislázuli para tu beneficio personal y espiritual
A día de hoy todavía se sigue usando en joyería, siendo Chile el país que más lo usa con este fin. Desde allí se exporta a Europa y Estados Unidos, donde su presencia está también asociada a creencias y supersticiones. Y es que desde siempre el lapislázuli se ha considerado un símbolo de pureza y nobleza, por su intenso color azul. Era este el motivo principal por el que las grandes dinastías de todas las épocas codiciaban el lapislázuli para sus monumentos funerarios. Sin embargo, los budistas fueron un paso más allá y asociaban poderes curativos a la piedra.
La energía que transmite la piedra es de gran ayuda para todas aquellas personas que tengan dificultades para tomar las riendas de su vida. Es el lapislázuli una piedra que sirve para abrir todos los niveles de tu ser, desde la parte más física hasta la más emocional, pasando por la espiritual. Esto hace que comprendas mejor diversos aspectos sobre tu persona y que puedas tomar decisiones en consecuencia.
Se suele utilizar, por este motivo, para realizar curaciones en la que se regule el alma en todos sus niveles. El equilibrio y la armonía que necesita viene de la mano del lapislázuli, que consigue que alcances la realización espiritual. Esto puede conseguirlo a través de la apertura de determinados chakras. Recuerda que este término hace referencia a los diferentes puntos de energía que se encuentran ubicados en las partes del cuerpo. Pues bien, con la apertura de los mismos, se potencian tus capacidades físicas, dotándote de una mayor energía. Además, se incrementa la actividad de los sueños, que pueden ser muy esclarecedores a la hora de tomar decisiones en el buen camino.
El lapislázuli hace que el cuerpo deje atrás todo el estrés que pueda haber retenido a lo largo de los años, por diferentes situaciones inherentes a la vida. Te aportará calma y serenidad y en ese estado desenvolverás una mayor creatividad para otros aspectos de tu vida. Esa calma también potenciará tu concentración, dejando atrás cualquier ruido que te provoque confusión. También te curará de aquellos males que tengas relacionados con migrañas, dolores menstruales, vértigos o insomnio. Si la llevas contigo durante la noche, lograrás dormir mucho mejor, con sueños positivos que llamarán por cosas buenas en tu vida.
Por último, la piedra lapislázuli actúa como guardián de tu cuerpo, proporcionando un efecto de seguridad y confort. La armonía llegará a tu vida en todos tus niveles, tanto el emocional como el físico y el espiritual. De este modo hallarás la autoconciencia para conseguir estar contigo mismo plenamente.
También actúa como poderoso calmante, logrando que desaparezca la ira que puedas tener reprimida en tu interior y atrayendo la felicidad a todo tipo de relaciones que tengas en tu vida, ya sean de amor o amistad.
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